“La paradoja de la predestinación establece que todos los actos que están ocurriendo y que van a dar lugar a un resultado futuro, no pueden ser modificados de ninguna manera. Lo que tiene que ocurrir, ocurrirá, es inevitable”
Estimados o no, habitantes del País de la Negatividad
La reina del pesimismo con ciertas dosis de inestabilidad emocional, paranoia, con cierto gusto por la autodestrucción, comunica que:
Cansada de su reino de historias de vida donde solo se encuentran tragedias de cierto carácter novelesco, con una gran carga trágica y sentimental. Abandona su reinado repleto de desgracias, negatividad, antisocialidad y egocentrismo puro y duro.
No dudando que más de uno y más de dos, se pegaran tortas por mi trono y dejándoselo difícil a mis posibles sucesores. Únicamente me llevo mi humor negro y me sujeto a la teoría del libre albedrio para poder meter la pata sin pensar que un señor con barbita me tiene manía o estar meditando qué puñetas hice en mi vida anterior para justificar ciertas cosas que ocurren.
Se despide, no sin antes desearles una larga vida de desesperanza y autocompasión.
La reina
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3 comentarios:
Sinceramente increible, "un amigo común" me recomendó que indagara en tu mundo paralelo donde dibujas aquello que no acepta el lienzo y he descubierto que es maravilloso. Nunca digas nunca jamás y vuelve, el trono está diseñado para tu puñetero culo!!!
La morena
"Un amigo común" me recomendó que viajase a través de las palabras que dibujabas y he descubierto que son una realidad digna de ser plasmada en lienzo.
Planteo un referendum que determine que vuelva la reina. Ese trono esta hecho para tu puto culo.
Un abrazo.
La morena
Majestad:
Con los mismos colores que pintas tus fantasías, empapa las paredes de ese cuarto que es tu reino, dentro de tu cabeza, y rásgalas cuando estén empapadas de color. Sal, pero quédate, porque estamos destinados a estar entrando y saliendo de manera perpetua de ese encierro preñado de desesperanza, porque así es como diferenciamos lo que significa estar dentro y fuera de la infelicidad.
Un cálido abrazo.
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